¿DE DONDE SALIÓ EL NOMBRE "ZOOFIESTA"?

Alguien me pregunto una vez porque había bautizado este blog como Zoofiesta, pues bien, espero aclarar las dudas si es que alguna vez las tuvieron, o informarlos de primera intención.
Zoofiesta es una palabra acuñada por mí, que es muy conocida en mi grupo de amigos, pero cuyo origen es muy peculiar y paso a contar, no sin antes narrar el contexto que permitió nacer a esa palabrita.

Hace un par de años cuando nuestra “mancha” recién estaba en pañales, a nuestra amiga la chata Chuwie se le ocurrió una idea muy peculiar para regalar en un cumpleaños de otro de nuestros miembros, como teníamos mucha imaginación para crear (en mi caso), y para dibujar (mi amigo Micky, ahora estudiante de la Escuela Nacional de Bellas Artes), bueno, la “chata” propuso que en lugar de comprar una tarjeta y firmarla con nuestras buenas intenciones, seria mejor gesto crear nosotros mismos la tarjeta, dibujarla y colorearla. Si, media infantiloide la idea pero la aceptamos de buen agrado cual crios de pre-kinder.

Y así lo hicimos, para el cumpleaños de nuestra amiga “Pollito”; compramos cartulina, la cortamos prolijamente y Micky, dotado para el dibujo plasmo a todos los integrantes de nuestro grupo en caricaturas, resaltando nuestros defectos y acentuando nuestras características peculiares. Y nos salió una tarjeta increíble, que le gusto mucho a la cumpleañera y la atesora hasta estos días. Fue el nacimiento de algo mas que solo una inocentona tarjeta con gansísimos dibujos. Así, creamos una tradición.

Paralelamente se nos ocurrió otra genial idea: hacer historietas con nuestras caricaturas. Plasmándonos en aventuras fácilmente identificables por el cine o la televisión donde la gracia era saber que personaje te había sido asignado y la manera como era representado en la caricatura con tus características. Asi, nos encargamos de las caricaturas solo dos personas, Micky quien dibujaba y yo, que ponía los textos y diálogos, nunca antes mi imaginación tuvo tan mejor uso porque nos salieron unas historias realmente delirantes y no hablo de 4 o 5 hojas, sino de complejas historias de 30 o 40 hojas que demandaban semanas en ser concluidas. Que luego de terminarlas nos concentrábamos antes de cada juerga solo para verlas y cagarnos de risa. El objetivo era burlarse de uno mismo, pasar un buen rato y reunirnos bajo cualquier excusa para terminar en una bomba de cerveza y comida chatarra.

Logramos armar la siguientes historias: El señor de los anillos (yo fuí Gandalf), Pesadilla en Elm Street (donde personifique a una victima mas), GLOW (¿recuerdan a las chicas luchadoras de Glow?... uhm, pues a mí me asignaron –contra mi voluntad- el papel de Scarlet, una de las chicas del Sur), La Bella y la Bestia (yo me encargué de Lumiere, el candelabro parlante), Los Thundercats (Felino presente), Star Wars (donde di vida a Dark Vader), La serie rosa (sin comentarios) y ¡Zoofiesta! (una pornográfica historia sobre el amor imposible de una inocente jovencita provinciana por los animales de cuatro patas, donde me encargue del rol del dueño del zoológico).

De estos, mención aparte merecen dos historietas: Star Wars, que fue sin duda la mejor de todas, realmente hilarante, fácilmente identificable por las películas y con mucha burla gratuita, fue la mas celebrada de todas. Y el otro sin duda fue ¡Zoofiesta!, vetada historia donde no se escatimaron pudores entre el amor libre entre animales y humanos, fue la mas divertida de todas, nadie de nosotros se olvidara de esa entrega por el contenido de sexo gratuito y explicito de todos los tonos, lamentablemente esta también fue nuestra última y más celebrada -al menos por los chicos- historia porque a tanto nos atrevimos que incomodamos a mas de uno y una, por usar sus cuerpos sin permiso, y entendimos el mensaje cuando nuestra historieta misteriosamente apareció hecha añicos una noche de copas en mi casa. Tanto Micky como yo, entendimos el malestar de nuestros amigos por que nos propasamos realmente con ellos, y bueno es muy divertido burlarse, pero algunos no estaban preparados para el fecundo contenido de nuestra imaginación.

Después de esta anécdota dejamos de hacer historietas -y tarjetas-, y comprobamos el nivel de tolerancia de personas que creíamos conocer muy bien. Yo aun conservo las tarjetas que me regalaron para mi cumpleaños y un par de las historietas de caricaturas, Micky posee las demás, pero para variar, lo dejamos de frecuentar así que le echo tierrita él poder recuperar las demás, aunque le pertenecen a él mas que a mí, pero que duda cabe hicimos una dupla que dio mucho que hablar con la ayuda de nuestras manos.

Por eso nace Zoofiesta, como una revancha para aquellos que no aguantan pulgas y explica también porque escribo mucho de mí mismo, pues a raíz de la experiencia de las caricaturas aprendí una cosa: “Hay que aprender a burlarse de uno mismo antes de atreverse a burlarse de los demás” y como lo que escribo casi siempre va en plan joda, pues no puedo controlar mi ironía y si hay una palabra que puede definirme, esta es sin duda ”jodido”, aunque yo creo que soy “jodidazo”.

Este post va dedicado para la gentita de mi manchita, que como público crítico son buenos borrachos.