CARAS VEMOS COLMILLOS NO SABEMOS

Aquí reseño una de las series más entrañables de su época, que capturo mi interés (hasta cierto punto) y seguro de muchos de ustedes también.

En cada generación nace una Cazadora. La Elegida. Una joven a la que se le otorga la fuerza y la habilidad para matar vampiros, demonios y otras fuerzas del mal, y así evitar que este se extienda donde ella este. En 1996, el dedo del destino apuntó hacia Buffy Sommers, convirtiéndola en la Cazadora. Desde entonces, ella tiene que combinar la nocturna lucha con los vampiros estaca en mano, con las batallas propias de su adolescencia: la escuela y los jalados, su madre y, por supuesto, el amor.

Lanzada en marzo de 1997 por la cadena Warner, la serie cómica de acción y horror “Buffy la Cazavampiros” se convirtió de inmediato en un éxito rotundo. La fama no tardo en llegar para su creador Joss Whedon y sus personajes: Buffy, su tutor Giles, sus amigos Xander, Willow y Cordelia, y Ángel, el sujeto de su afecto.
En la serie, Buffy es una chica de 16 años que llega al bucólico pueblo de Sunnydale (Valle Soleado), a primera vista una copia moderna de Riverdale (el hogar de Archie, Betty, Verónica, Carlos y Torombolo), en busca de una nueva vida. Su iniciación como Cazadora se había consumado un año atrás y, como resultado de su primer gran enfrentamiento con los vampiros, el gimnasio de su escuela quedo reducida a cenizas, y ella fue expulsada.

Sin embargo, Sunnydale no es lo que parece ser. Debajo del luminoso pueblo yace la Boca del Infierno, un enclave místico que atrae a las fuerzas del mal y que concentra a un buen numero de monstruos a sus alrededores.
Por estos lares, Buffy encuentra ayuda en su Vigilante, Giles, un ingles que forma parte de una organización secreta de tutores que preparan a las Cazadoras para su misión. También cuenta con sus compañeros Willow y Xander, la estudiosa y el inadaptado de la escuela, quienes se vuelven sus mejores amigos, con Cordelia, la estirada y engreída fémina de la escuela, y con el misterioso Ángel, una figura que aparece al principio para alertarla de los peligros inminentes y que luego se va convirtiendo en su ser amado. Pero por ironías del destino, y por una maldición gitana, Ángel resulta ser un vampiro con alma.

Además de la llegada a Sunnydale –o sea la Boca del Infierno- y de la introducción de amigos y aliados, la primera temporada de Buffy incluyo como némesis de la Cazadora al Maestro, el vampiro más antiguo y uno de los más poderosos, de quien se profetizaba que mataría a Buffy y abriría la Boca del Infierno. Como de hecho lo hizo, aun cuando ella estuvo muerta por un minuto y pudo, finalmente, acabar con él.

En la segunda temporada del programa, Sunnydale (que se caracteriza mas por su vida nocturna que por otra cosa) recibe la llegada de Spike y Drusilla, una pareja letal de vampiros (ambos creados y orientados hace tiempo por Ángel) que llega de Praga a restaurar la salud de la vampiresa.
Además, se descubre la juventud tempestuosa de Giles como parte de un grupo de magia negra, aparece una nueva cazavampiros de nombre Kendra –una muchacha jamaiquina que fue “llamada” cuando Buffy “murió”-, el hombre lobo rockero Oz se une al grupo de amigos como pareja de Willow y Ángel pierde su alma y se transforma nuevamente en Ángelus, el cruel.
Al final de la temporada, contada en los impactantes episodios Becoming 1 y 2, Buffy debe salvar al mundo y acabar con Ángelus. Expulsada de la escuela, con sus amigos heridos, Kendra asesinada y Spike como aliado, Buffy salva al mundo matando a Ángel segundos después de que este recobre su alma humana. Y luego se va de Sunnydale.

La tercera temporada trae de regreso a Buffy a su pueblo para dar explicaciones y curar heridas. Y también a Ángel, quien es liberado del mundo de los demonios. Aparece Fe, una cazadora que es llamada tras la muerte de Kendra, el alcalde Wilkins, un sociópata de cien años que busca convertirse en demonio en La Ascensión, Anya, un demonio vengador de las mujeres, y Wesley, el nuevo vigilante de Buffy y Fe, esta ultima la cazadora rebelde y más parrandera de la serie.
El episodio final de esta temporada, Día de Graduación 2, fue postergado en su emoción original debido a los atentados (tiroteos) de una secundaria de Littleton, Colorado. La cuarta temporada trajo muchas novedades: los chicos se graduaron (incluida Buffy), Willow inicia un “cambio” sentimental y se vuelve lesbiana al iniciar una relación con otra chica del pueblo a la vez que sus dotes de bruja empiezan a rendir sus frutos, Spike nuevamente del bando de los villanos por traicionero, y Ángel se muda a Los Ángeles (en la serie) en donde trabaja como investigador de hechos paranormales (con su propia serie) al lado de Cordelia, quien adquiere poderes sensoriales (¿?, cosas del guionista) y tambien aparece la hermana de menor de Buffy que se supone es "la llave", ¿de que?... uhm, ni idea. La serie concluye pero no se los cuento no se como termino ya que le perdí el interés en esta parte de la historia.

Desde el principio, Buffy empezó a distinguirse de la oferta semanal de series de televisión. Los personajes evolucionan y se vuelven más complejos a medida que se despliega su historia y se descubren las consecuencias de sus acciones o los secretos de su pasado. Ángel, por ejemplo.
De haber sido uno de los mas viles malvados vampiros sobre la tierra, pasa a ser un paladín del bien al lado de Buffy y su novio. En tanto Fe, una cazadora sustituta que aparece en la tercera temporada, se convierte de aliada de los buenos en guardaespaldas y matona de los malos.

Con un estilo ligero, lleno de estética y las convenciones de los comics modernos (comiquitas o tebeos, según el país), desde el citado Archie hasta toques del oscuro Spawn; y las comedias adolescentes, Buffy la Cazavampiros pretende ir mas allá de los clichés juveniles, las patadas voladoras y los monstruos malvados. Intenta narrar relatos de amistad y amor, hacer comentarios, en forma de metáforas o alegorías, de la cultura popular estadounidense (la pesadilla de la secundaria o Sid Vicious y su novia, cuyas figuras son representadas por el vampiro punk Spike y su novia Druscilla), y contar, especialmente, historias de crecimiento y madurez. Como en los antiguos cuentos y leyendas los “dragon slayers” o matadores de “dragones” (de hecho slayer se traduce mejor como matador que como cazador), sus más antiguos predecesores narrativos.

En ellos siempre había un joven escogido –por el destino, el rey o Dios- para enfrentar a un monstruo, representante del mal, del miedo y la oscuridad. Generalmente al escogido se unían otros aventureros por amistad, amor, aventuras o tesoros. Y Buffy reproduce este mito. Eso sí, pasado a la época moderna estadounidense y salpicado con peleas con seres fantásticos, efectos especiales (sobretodo vampiros convirtiéndose en polvo tras la estacada de rigor) y una buena dosis de humor.